8 de la mañana, abres los ojos, te estiras, te cambias de lado para ver si te vuelves a dormir, mientras se escucha ¡la bendita alarma del celular!
De inmediato ese bello ritual al empezar el día, es arruinado por ese horrible sonido, que por más que le pongas un “tonito zen”, siempre acaba poniéndote de malas.
Estiras la mano, apagas la alarma y entras a los benditos mensajes.
Y es aquí cuando llevas escasos cinco minutos despierto y ya comienzas a hacer política.
Lunes, 8 a.m.: arrancas la semana con diez mensajes sin leer. Pero sólo ejemplificaremos los primeros cinco (por aquello de los 8 mil caracteres que nos solicitan para escribir este artículo, je)
“Se trata de entender a los ciudadanos, lo que ellos quieren y necesitan”.
Mensaje 1:
“Buenos días…”, siendo el portavoz un pintoresco gato o pajarito que seguro vive en Amorland que te manda tu mamá, tu tía o tu suegra, y aunque los odies, tu respuesta siempre es lo más sutil y educada.
Tu ‘yo’ político:
- “Muchas gracias, bonita semana para ti también. TQM”.
¿A poco no? Y desde ahí, ya comienzas a hacer política.
Mensaje 2:
Tu colaborador:
- “Jefe me siento mal, voy al doctor y ahí te mando mi comprobante médico. Gracias por el permiso”.
Tu ‘yo’ verdadero:
¡¿Qué permiso?! ¡Si vi tus historias de IG ayer y andabas en pleno festejo de tu equipo de fútbol hasta altas horas de la noche!
Tu ‘yo’ político:
- “NTP, te veo en la oficina cuando salgas del médico”.
(¡Jeje! A mí no me la aplican)
Y sigues haciendo política.
Mensaje 3:
Tu cliente:
- Hola, ¿cómo estás? Estuve analizando la propuesta que me enviaste, yo creo que no es el momento aún de salir, esperemos un poco más…
Tu ‘yo’ normal:
- ¡¿Qué diablos estás escribiendo?!
¡La campaña comienza en un par de meses y bien sabes que no nos dará tiempo de arrancar, vamos abajo, carajo!!!!!
Tu ‘yo’ político:
- No te preocupes, veamos la forma de echar a andar tu proyecto, recuerda que el tiempo no regresa. ¿Cómo anda tu agenda?
Tres mensajes, y continúas haciendo política.
Mensaje 4:
Tu partner / socio / equipo de campaña:
- El equipo del candidato(a) dice que NO van a producir los spots, que las ideas no le gustaron, que quiere más propuestas innovadoras para dentro de una hora.
Tu ‘yo’ político:
- Dile al cliente que no se preocupe, que tenemos un par de ideas más “disruptivas” que les van a encantar.
Tu ‘yo’ normal:
¡Localízame ahora mismo a suprimo el nombre y dile que se aplique y que se concentre al 100% o se va en este momento! ¡Queremos ideas en 20 minutos!
Cambias de estado de ánimo en menos de 10 minutos, pero, continúas haciendo política.
Mensaje 5:
Tu bendito mecánico:
- Como anda patrón, oiga fíjese que le salieron un par de detalles extras a su vehículo, y pues la cotización se incrementa un poco más. ¿Cómo ve?
Tu ‘yo’ normal:
- ¡¡¡Pues mal!!! ¡¡¡Puras fallas contigo, dame soluciones, no más problemas!!!
Tu ‘yo’ político:
- Tú dale para adelante y luego hacemos cuentas. ¡Me urge para hoy!
Y sigues haciendo política.
“Política la haces todos los días, en todo momento”.
El reloj marca apenas las 8:30 a.m. de la mañana y lamento decirte que te guste o no, todos los días haces política.
Entendiendo que política es:
-
- Arte, doctrina u opinión referente al gobierno de los Estados.
- Actividad de quienes rigen o aspiran a regir los asuntos públicos.
- Actividad del ciudadano cuando interviene en los asuntos públicos con su opinión, con su voto o de cualquier otro modo.
- Cortesía y buen modo de portarse.
- Conjunto de orientaciones o directrices que rigen la actuación de una persona o entidad en un asunto o campo determinado.
Si eres candidato o perteneces a un equipo de campaña, no dejas en ningún momento de trabajar en ella, 24/7, en todo momento o en cualquier lugar. Y como el tema de este texto señala: TODA COMUNICACIÓN ES POLÍTICA.
Por último, te dejo una reflexión.
Esta época no se trata de bailar en TikTok, subir una mega foto en IG, tener un gran video o discurso, se trata de entender a los ciudadanos, lo que ellos quieren y necesitan.
Comienza a quitarte de la mente que política haces sólo cuando eres servidor público o cuando estás en campaña, política la haces todos los días, en todo momento y recuerda que, lo que menos quiere la gente hoy, es que les hables de política.
No le hablas a estructuras o a votantes, a distritos, regiones, cantones o estados,
le hablas a personas. ¡Comunícate con ellas!
Cuéntales una historia, si no sabes cómo o necesitas ayuda, danos el honor de contarla.