Las campañas electorales son batallas estratégicas muy complejas en las que intervienen diversos factores, que pueden ser resumidos en 5 principales:
- La trayectoria personal del candidato
- El posicionamiento político
- Las tácticas comunicacionales
- La creatividad publicitaria
- Y las habilidades y recursos discursivos
Por supuesto que podemos adicionar:
- El equipo y la militancia del espacio político
- Los apoyos y alianzas
- El presupuesto general
- Los antecedentes partidarios
- Y sobre todas las cosas, el contexto.
En esta línea, podemos avanzar diciendo que, a partir de un gran diagnóstico, se trazan ejes para determinar metas que nos conduzcan al objetivo planteado.
Una disrupción (permítanme)
Uno de los problemas a los que nos enfrentamos los consultores es hacer entender que ganar la discusión o tener razón no necesariamente tiene asociado un triunfo electoral. ¿Cuántos candidatos del sentido común pierden en las urnas de modo apabullante?
Sigo…
Una vez definido el diagnóstico, ejes, estrategia, comunicacional, publicitario y discursivo, nos vemos en la obligación de determinar en qué posición se encuentra el candidato de la carrera por el voto, para así poder establecer un objetivo y la ruta necesaria para conseguirlo.
Las 6 escalas para lograr el voto
Paso 1. Visibilidad:
El primero de los pasos implica darse a conocer, que en definitiva muestra la firme decisión de presentarse a un cargo electivo.
La fórmula = + exposición pública, mediática y digital
= visibilidad
Paso 2. Conocimiento:
No se vota a quien no se conoce y es solo a partir de conseguir visibilidad que se puede amplificar el conocimiento del candidato, esto requiere de algún valor agregado o de la capacidad para satisfacer una demanda en el mejor de los casos. También existen vías distintas para hacerse conocido, pero aquí planteamos las ideales. También se puede lograr una alta visibilidad mediática por ejemplo y no lograr capitalizar en conocimiento.
La fórmula = + visibilidad + calidad de las propuestas o satisfacción de demanda ciudadana + tiempo
= conocimiento
Paso 3. Reconocimiento:
El desafío en esta instancia es aportar algún grado de eficiencia, eficacia o éxito en la acción, de modo de capitalizar el reconocimiento ciudadano. De algún modo impacta en favor de la reputación y el prestigio del candidato.
La fórmula = conocimiento + eficiencia o éxito de lo realizado
= reconocimiento
Paso 4. Confianza:
Una vez visible, conocido y reconocido, si el candidato tiene firmeza, demuestra convicción, seguridad en su propio planteo y compromiso con las causas que representa, de modo sostenido en el tiempo, probablemente pueda generar confianza.
La fórmula = reconocimiento + firmeza + convicción y seguridad
= confianza
Paso 5. Apoyo:
Una vez lograda la confianza, existe un salto cualitativo para conseguir el apoyo de un ciudadano a la propuesta de campaña o al candidato. El apoyo se basa en que el ciudadano adquiere y sostiene al menos parte de las premisas, ideas, valores o propuestas del candidato.
La fórmula = confianza + adquisición de parte de la propuesta
= apoyo
Paso 6. Voto:
Luego de este largo proceso de 5 pasos, se suma el análisis de la competencia y el contexto.
La fórmula = conocimiento + reconocimiento + confianza + apoyo + contexto + competencia
= voto
Conclusión
Un viejo refrán de consultor dice: “Hay quienes saben ganar discusiones y quienes saben ganar elecciones” no es lo mismo.
El proceso de 6 pasos para conseguir el voto explica muchas veces porque candidatos poco entrenados en las campañas quedan expuestos sin comprender lo que sucedió.
En la mayoría de las ocasiones fallan en el diagnóstico, porque subestiman a los rivales o no encuentran el verdadero paso (de los 6 en los que se encuentran).
Conocemos mil historias en la que las mejores ideas las tienen dirigentes que no los conoce ni el 75% del electorado por lo que arrancan a competir literalmente: “Fuera del juego”
